A mediados del Siglo XIX, Vincent Van Gogh, Claude Monet, y muchos otros pintores impresionistas de la época se enfrentaban a una fuerte oposición por parte de la comunidad de arte tradicional en Francia. Esto no los detuvo y se aferraron a una visión y a un sistema de creencias independientes a lo que era aceptado convencionalmente en ese entonces. No esperaron por un aval, un certificado, o cualificación profesional para determinar que el color era un tema tan importante como el tema en cuestión. Al hacer esto, imprimieron colores brillantes y formas extáticas en los lienzos, dando pie a uno de los movimientos artísticos más importantes del Siglo XIX. Su iniciación fue su vida, su lienzo su sinfonía –oda al amor que descubrieron al ser, hacer, experimentar, expresar y evolucionar como artistas.

Con el comienzo de este nuevo año, me parece una lección importante para todos. Cundo nos damos cuenta de que la vida es una iniciación, nos percatamos de que no hay víctimas – solo estudiantes. No hay escuelas de sabiduría ancestral a las cuales asistir. En cambio, la vida es nuestro patio, un laboratorio alquímico en el que nos dieron rienda suelta para pensar, jugar, experimentar, aprender y crear.

Si no estamos creando nuestra vida intencionalmente, estamos siendo víctimas de ella; y como víctimas, reaccionamos de maneras muy predecibles. Ser una víctima significa que algo o alguien en nuestro entorno externo está controlándonos, y por eso mismo somos incapaces de cambiar nuestras conductas y reacciones a las circunstancias ¿Por qué sucede esto? Porque nuestros cerebros se han convertido en registros neurológicos del pasado y nuestros cuerpos han sido condicionados emocionalmente y químicamente al pasado.  Y luego nos preguntamos por qué nuestras vidas se mantienen igual; la verdad en cuestión es que existe sincronía exacta entre la biología de nuestro mundo interno de pensamientos y sentimientos, y nuestro mundo externo de la realidad.

Cuando comienzas a ver la vida como una prueba de iniciación –  cuando dejas de pensar de la misma manera, inconscientemente demostrando los mismos hábitos o comportamientos, y emocionalmente reaccionando de la misma forma ante la gente, cosas, o circunstancias,  y en cambio mantienes una visión independiente a las circunstancias de tu vida – cosas interesantes suceden. Conforme empieces a hacer cosas que quizás en un principio no tengas ganas de hacer, pero que son consistentes con tu visión, tu mentalidad comienza a cambiar y dejas de creer que eres una víctima sin opciones. Como resultado, enfrentas los desafíos de tu vida desde un nivel de consciencia mayor. Después la vida empieza a lucir más como un juego y menos como una situación de vida o muerte en donde eres una víctima indefensa.

De víctima a vencedor.

¿Cómo crear el estado interno de mente y cuerpo que te permitirá superar las condiciones externas de tu vida?

Alguien en la historia del mundo se ha enfrentado a problemas similares a los tuyos y ha salido avante. Eso significa que ellos o alguien más han escrito al respecto. Tu trabajo es estudiar su vida y descubrir que piezas de conocimiento, filosofía, verdad, información y entendimiento estos individuos revelaron para superarse a ellos mismos y a las desafiantes circunstancias de sus vidas. Cuando apliques esto a tu situación – y por consiguiente hagas elecciones diferentes, modifiques tus creencias, crees nuevas experiencias, reacciones y te sientas diferente – te darás cuenta de que es posible crear un resultado diferente. Es así como encaras los retos con otro nivel de consciencia. Entre más aprendas a través del conocimiento de lo que es posible, y después transformes esa información en acciones, tendrás más control sobre ti y poder para cambiar tu realidad.

Lo que estás obligado a descubrir es que el simple hecho de moverte en una nueva dirección y hacer decisiones diferentes, traerá cosas nuevas a tu vida. Conforme emprendes este viaje, mantente despierto y abierto a la posibilidad – ese impulso impredecible que te lleva por nuevos caminos y  hacia nuevas ideas, aprendizajes, gente y oportunidades. Es en este proceso nos iniciamos en niveles mayores de consciencia, energía, amor, gratitud y plenitud. A esto se le llama evolución y es lo que estamos haciendo en el planeta tierra.

Eventualmente, con estos ojos que tu nuevo nivel de consciencia te provee, encontrarás un hilo que conecta eventos de tu vida, y verás que todo lo que has hecho ha alimentado todo lo que estás haciendo. Y cada vez se te hará más sencillo distinguir ente los elementos que funcionan y los que tienes que dejar atrás en el camino. El efecto secundario, por supuesto, es un grado mayor de amor propio, y es esta totalidad lo que nos acerca a nuestra naturaleza divina.

Al comenzar este nuevo año, enfrentar nuevos retos y experimentar nuevas dimensiones de amor y alegría, recuerda que la vida es la iniciación. Estamos aquí en esta dimensión porque esto es un escenario para demostrar lo que creemos como verdad, y para demostrarnos a nosotros mismos que podemos evolucionar a niveles más altos de totalidad. Todos hemos negociado las condiciones actuales de nuestras vidas, al igual que nuestros cuerpos y genética, para crear mejores oportunidades de evolución espiritual. Estamos aquí como almas en un plano de demostración, para demostrar grandeza. Una vez que aceptemos este concepto como verdad,  esto se convierte en algo en donde es menos importante obtener cosas y más importante ver en lo que nos hemos convertido.

No hay víctimas en este lugar, solo voluntarios. ¿Por qué no hacer de este 2017  un año para enfrentar la vida con una nueva actitud y evolucionar de iniciador a maestro?