Las personas ricas piensan diferente a la gente promedio. Steve Jobs, cofundador de Apple, quién murió con un valor neto estimado de 10.2 billones de dólares, no fue la excepción.
Jobs dijo una frase que podría encapsular perfectamente la mentalidad del billonario:
“Todo lo que está a tu alrededor, a lo que le llamas vida, fue creado por gente que no era más inteligente que tú. Tienes la capacidad de cambiar tu alrededor, puedes construir cosas que otra gente podría utilizar”
Eso es algo que las personas con mucho dinero tienden a internalizar. Los millonarios se dan cuenta de que el mundo es flexible. Con suficiente presión aplicada a un esfuerzo, la gente lo suficientemente ingeniosa puede cambiar el mundo. En cambio, la mayoría de las personas se dedican a asumir el estado del mundo como algo estático, o dado.
La gente rica tiene una mentalidad enfocada a las acciones y resuelven problemas constantemente. Como dijo mi socio Steve Siebold “Mientras las masas están esperando los número correctos y rezando por prosperidad, los grandes se encuentran resolviendo problemas”.
Esto no significa que son más inteligentes que la persona promedio. Jobs expuso que “Simplemente son más estratégicos”. Cuando los ricos necesitan dinero, no se preguntan si es posible, simplemente comienzan a crear nuevas ideas para resolver problemas. Entre más grande sea el problema que resuelven, más dinero hacen.
Al final del día, hacerse rico es un trabajo interno: Todos pueden hacerse ricos, no es lo que haces lo que garantiza riquezas sino quién eres. Por extraño que suene, hacerse rico tiene que ver más con la mentalidad de las personas, que con el dinero.
Steve Siebold y yo hemos entrevistado a más de 1,200 de las personas más ricas del mundo, en las últimas tres décadas. Estas enseñanzas han quedado plasmadas en el webinario semanal en fortaleza mental, con más de 150 lecciones para aprender a pensar y actuar como la gente exitosa.
Por tu éxito,
Alejandro.